Baloncesto - LEB Oro

83-86 | El Leyma se queda en la orilla

Los naranjas rozaron la remontada con el apoyo de Riazor en el último cuarto ante el Fuenlabrada

Sean McDonnell abandonó el partido después de una mala caída

Daniel Abelenda Lado

Daniel Abelenda Lado

El Leyma Coruña se quedó a cuatro puntos de obrar una remontada agónica en el último cuarto ante el Fuenlabrada, que asaltó O Forno con un apretado 83-86.

Acorde con la temperatura del Palacio de los Deportes de Riazor en el primer fin de semana de diciembre, el Leyma Coruña salió congelado al parqué. Solo una canasta de Huskic por media docena del conjunto fuenlabreño, que arrancó el partido con un rodillo en ataque en las manos de Tomás Bellas y Tanner McGrew. Diego Epifanio pidió el primer tiempo muerto cuando los visitantes instauraron una ventaja de más de diez puntos, 2-13. Un triple de Barrueta y el acierto de Huskic y la precisión de Álex Galán e Ingus Jakovics, desde el tiro libre, consiguieron devolver al conjunto naranja al partido. El Fuenlabrada no se dejó impresionar por una grada que comenzó a crecerse con su equipo y mantuvieron el pie en el acelerador. Un nuevo triple, esta vez de Beqa Burjanadze, conectó por segunda vez al Leyma, aunque no fue suficiente para impedir que el cuarto terminase 20-25 para el Fuenla.

Mejoraron los hombres de Diego Epifanio en el inicio del segundo parcial. Una canasta de dos de McDonnell, un tiro libre y otra anotación de dos de McDonnell igualaron el encuentro, 25-25. Por el medio, Diagne repartió dos tapones que levantaron la moral en defensa. Un triple de Álex Hernández consiguió la primera ventaja para los de casa, aunque duró muy poco. El Fuenlabrada volvió a presumir de un gran acierto desde el triple para recuperar el marcador favorable. Cuando el duelo marchaba 28-30, ocurrió el susto de McDonnell. El alapívot californiano se hizo daño en una caída al luchar por un rebote y tuvo que abandonar el encuentro, rumbo al hospital, conmocionado y desorientado. En la pista, los naranjas perdieron el empuje que habían logrado al inicio del cuarto y, como resultado, se marcharon cuatro abajo al descanso, 38-42.

No acababa de entrar en calor el equipo coruñés. Tampoco lo consiguieron con el paso por los vestuarios. El tercer cuarto arrancó con un brutal estado de forma del Fuenlabrada desde la línea de tres. Tres triples consecutivos elevaron la renta hasta los 15 puntos, 40-55. Uno de Yunio Barrueta amagó con despertar al Leyma, que seguía muy perezoso en las defensas de los tiradores exteriores. Beqa, Álex Hernández o Aleix Font, que se reconcilió con el triple, intentaron acercarse antes del último cuarto, 53-66.

La penetración de Beqa Burjanadze para abrir el cuarto y la réplica desde el triple de Tomás Bellas fue el resumen de todo el partido en cuestión de unos segundos. Al Leyma no le faltaron ganas en los últimos diez minutos de buscar un empate que cada vez se veía más y más complicado. Los tiros libres permitieron al Fuenla alcanzar la máxima diferencia, de 16 puntos. El ruido de la grada en las defensas no fue suficiente para desbaratar los ataques fuenlabreños, que siempre encontraban premio. Bien en canasta, bien en tiros libres. Un mate de Diagne con más de seis minutos para el final insufló nuevas esperanzas en la grada, pero, una vez más, el golpe por partida doble de la ofensiva del equipo madrileño volvió a hacer mella. El Leyma se chocó una y otra vez contra la barrera psicológica de los 14 puntos al tiempo que el pívot senegalés se empeñaba en romperla con su poderío en la zona. La eliminación de Eduardo Durán, máximo anotador del partido con 19 puntos, animó a la parroquia naranja por enésima vez. Los triples de Barrueta y Jakovics, 74-78, apretaron los últimos tres minutos ante el ensordecedor jaleo de la afición. Otro triple del letón estableció el 79-80 y los tiros libres de Diagne obraron el empate, 80-80. El mismo acierto desde la línea en la otra canasta y un error de Jakovics en el triple le dieron una ajustada victoria al Fuenla, 83-86.