Los vecinos de Agra dos Mallos deben pagar importantes sumas para conservar sus casas

La normativa urbanística concede a sus parcelas mucha menos edificabilidad de la que poseen sus actuales viviendas

El Concello dice estar abierto “a todas las posibilidades”

Imagen virtual del polígono Agra dos Mallos tras su construcción. Los bloques en blanco son los futuros edificios de viviendas. |   // LA OPINIÓN

Imagen virtual del polígono Agra dos Mallos tras su construcción. Los bloques en blanco son los futuros edificios de viviendas. | // LA OPINIÓN / José Manuel Gutiérrez

Las cuatro familias que residen en otras tantas viviendas unifamiliares del lugar de Agra dos Mallos tendrán que abonar importantes cantidades si desean permanecer en ellas, ya que la normativa urbanística del polígono que lleva esa denominación concede a sus parcelas una edificabilidad mucho menor de la que poseen sus viviendas actuales. En el caso de que decidieran continuar residiendo en ellas, tendrían que compensar a los propietarios del suelo del polígono, entre el que el Concello es el principal.

Los afectados han recibido propuestas municipales para adquirir sus casas o para que se conviertan también en promotores, lo que les obligaría a contribuir a los gastos de urbanización del polígono. Esa última posibilidad les llevaría a abonar cantidades más reducidas que las impuestas por el exceso de edificabilidad, ya que se trata de una actuación de pequeño calado y de la que queda excluida la construcción del nuevo vial que enlazará con la estación intermodal, que se financiará con fondos europeos.

Ante la negativa de los vecinos a pagar por el exceso de edificabilidad y sus protestas porque al elaborar la normativa para el polígono se les garantizó la permanencia de sus viviendas, fuentes municipales señalaron a este periódico que el Concello “tiene abiertas todas las posibilidades y valorará en su conjunto la decisión final a adoptar”.

Manuel Barrientos, uno de los vecinos perjudicados por esta iniciativa urbanística, señala que para evitar la desaparición de su casa tendría que pagar más de 100.000 euros, a lo que habría que sumar las cuotas de urbanización, por lo que la cantidad total sería de 133.000 euros. Según dice, a su vecina, que tiene un inmueble con bajo y dos plantas, le ofrecen tan solo 50.000 euros por abandonarlo para dejar paso al edificio de tres y seis alturas más planta baja que está previsto construir en ese mismo lugar.

Barrientos recuerda que durante la tramitación del cambio del plan general necesario para trazar los accesos a la intermodal se les aseguró que sus viviendas podrían continuar en el lugar, pero no se les informó que para ello tendrían que pagar. También añade que los afectados no presentaron alegaciones antes de la aprobación definitiva del nuevo planeamiento porque los responsables municipales les indicaron que no tendrían ningún problema.

Ocupación ilegal

El polígono de Agra dos Mallos tiene una superficie de 33.098,99 metros cuadrados y una edificabilidad de 12.919,26 metros. El 40% de las viviendas que se construyan serán de protección pública. El Concello ocupó de forma ilegal a principios de este siglo 6.037 metros cuadrados de terrenos incluidos ahora en el polígono para construir el centro cívico de Os Mallos, que fue inaugurado en mayo de 2003.

Los propietarios se percataron de este hecho cuando las obras ya habían comenzado y recibieron como justificación que el edificio había sido financiado con fondos europeos y con plazos muy ajustados que motivaron que no se comprobase a quién pertenecían los terrenos. En 2002 alcanzaron un acuerdo con el Concello para que las fincas se reparcelasen antes de que concluyese 2003. Si ese plazo se superaba, los dueños del terreno deberían ser indemnizados en función de la edificabilidad que poseían y su valor de acuerdo con los datos catastrales.

Una parte de esa edificabilidad fue trasladada al vecino polígono de Vioño, pero por el resto el Concello paga anualmente a los propietarios desde 2004. La última cantidad de la que hay constancia fueron 19.764 euros en 2022.

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