La falta de regulación dificulta la instalación de placas solares en el casco histórico de A Coruña

Peticiones recientes para situar paneles fotovoltaicos en edificios de Pescadería y Ciudad Vieja se topan con el plan de protección, que “no recoge la posibilidad” de colocarlos en cubiertas

Sistema de bomba de calor con paneles solares en A Coruña.

Sistema de bomba de calor con paneles solares en A Coruña. / Iago López

Los dictámenes más recientes de la comisión asesora del Plan Especial de Protección y Reforma Interior (Pepri) del casco histórico de A Coruña tumban tres peticiones de instalación de paneles fotovoltaicos en las cubiertas de sendos edificios, ubicados en calles de las zonas de Ciudad Vieja y Pescadería. Los expertos que forman la comisión emiten un fallo desfavorable que se apoya en que el plan especial “no recoge la posibilidad” de disponer estos paneles que aprovechan la luz solar para transformarla en energía eléctrica, “tal y como se concluye en los estudios e informes que configuran el trabajo previo a tramitación de la normativa” del propio Pepri.

Estas peticiones corresponden a un edificio de la calle Real con protección estructural que solicita los paneles para autoconsumo; otro de la calle Torreiro con protección ambiental para el que también se pide un cambio de uso de comercial a residencial; y uno de la calle Herrerías no catalogado, del que el dictamen señala que no se puede autorizar la instalación de paneles porque el edificio debe mantener el “sistema arquitectónico original” al estar ubicado en un ámbito de Conjunto Histórico BIC. “Fuera del entorno de este conjunto se estudiará caso por caso la situación y características de cada edificio catalogado”, añade el dictamen.

El informe de la solicitud de la calle Real indica que el conjunto de este ámbito “es incompatible con la distorsión que producen” los paneles solares; mientras que el de Torreiro apunta que la inclinación de la cubierta del inmueble “desaconseja” que se instalen los paneles.

El interés de tres particulares o comunidades vecinales por apostar por el aprovechamiento de la energía solar a través de paneles fotovoltaicos resulta anecdótico en una ciudad como A Coruña, en opinión de empresas especializadas en su instalación y de los profesionales de la administración de fincas. “En la ciudad es muy poco común que alguien quiera paneles solares, salvo que sea una vivienda unifamiliar, donde hemos hecho alguna obra”, señalan fuentes de Twsolar Galicia, que añaden que las peticiones son más habituales en “casas particulares de la comarca”. “En 2022 y 2023 creció mucho el interés, que coincidió con la subida de la luz y con las subvenciones europeas”, explican.

Ángel Solís, de Aerosolar Térmica, coincide con este análisis, señala que grandes consumidores de energía, como talleres o naves industriales, “tienen más rentabilidad” con paneles fotovoltaicos, y apunta que “cuando se piensa en el ahorro de gasto en calefacción” hay “mayor demanda” de sistemas de aerotermia con bombas de calor.

Los administradores de fincas advierten “falta de convicción” en la población a la hora de optar por un sistema de transformación energética mediante paneles solares, además de “falta de información”. “Los fondos Next Generation se aprovecharon más para rehabilitar cubiertas y fachadas que para paneles fotovoltaicos. Es una inversión importante que requiere acuerdos en las comunidades y que, según las condiciones de los edificios, puede ser compleja técnicamente. Creemos que la mayoría de la gente no está concienciada o es escéptica respecto al ahorro real de energía”, opina Teresa Suárez, presidenta del Colegio de Administradores de Fincas de Galicia.

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