baloncesto - LEB Oro

74-83 | Jakovics y Huskic, al rescate del Leyma

Los triples del letón y los puntos en la zona del serbio hicieron de salvavidas ante un animoso, pero menor Castelló | Mete presión a sus rivales de cara a la Copa

Sebastian Aris y Diagne

Sebastian Aris y Diagne / BC

Carlos Miranda

Carlos Miranda

Nadie guardará en una videoteca el Castelló-Leyma. Nadie le reservará un hueco en su memoria, salvo quizás Diego Epifanio, porque alguna fase del juego le martilleará durante un tiempo. Pero el Básquet Coruña ganó en un mal día (74-83), como lo hacen los grandes equipos, los elegidos, agarrado a los cinco triples de Jakovics, al juego de pies de Huskic en la zona y a destellos de Burjanadze, Sebastian Aris, Alejandro Galán y Sean McDonnell. Dos líderes y cinco aderezos para hacer hincar la rodilla al conjunto en peor en forma de la LEB Oro, el Amics Castelló, que se mostró dañinamente desordenado y voluntarioso para incomodar sobremanera a los coruñeses. Joan Faner, Dani Machón, Bresaan, Aboubacar y Josep Franch lideraron la resistencia y un intento de asalto que no pasó de eso, de un intento. El grupo naranja durmió líder y ahora espera algún fallo de sus rivales directos, Burgos y Estudiantes, para arrebatarles una de las dos plazas que dan derecho a jugar la Copa de la Princesa. Muchas miradas puestas en el derbi de hoy entre San Pablo y Tizona.

El Leyma de los tanteos altos se había quedado en A Coruña o, al menos, se hacía de rogar en el inicio del duelo. Los fallos se imponían a los aciertos y el Castelló no dejaba correr a los coruñeses, algo que les molesta en un alto grado. Ese primer cuarto no fue, precisamente, el mejor momento de Huskic o Yunio Barrieta. El equipo naranja se sostuvo gracias a cuatro puntos claves de Aris y a seis de Jakovics. Hacía poco o nada y, con un par de flashazos, era capaz de poner tierra de por medio con un empequeñecido Amics Castelló. Llevaba uno de cinco en triples y se marchaba, aun así, 10-18 al final del primer periodo. Con que acertara un poco...

Pero no lo hizo y se condenó a sufrir. El Leyma vivió dos miniperiodos en ese segundo cuarto antes del descanso. Empezó a soltarse, ya con Huskic enchufado, y de repente se colocó 14-29 sin despeinarse. Aunque seguía estando fallón, parecía un punto de inflexión en un duelo que se iba a romper. No fue así. A partir de ahí, empezó el Titanic para los coruñeses. Fallo tras fallo. Triple a tabla, triple que se salía. Nada entraba, tampoco la selección de tiro ni la forma de trabajar el ataque eran las mejores. Solo le rescataba alguna jugada de Burjanadze, alguna aparición de Huskic. El Castelló, hasta el momento tímido, aprovechó ese tramo para desatarse. Gracias sobre todo a Bressan y Aboubacar, llegó al intervalo 32-35. Parcial de 18-6. El Leyma acumulaba ya por entonces 2 de 15 en triples.

Del tercer cuarto el Leyma se comió los bordes y se agarró a los salvavidas de Jakovics y Huskic en un partido que olía a naufragio. El letón clavaba su cuarto triple y el serbio era el rey de la zona con su indescifrable juego de espaldas. Una delicia. Del 32-41 que logró de salida al ajustado 53-55 y el 53-59 que hizo de foto fija antes del último acto.

El equipo naranja no lo pasó nada bien en los últimos diez minutos. A diferencia de su nefasto 5 de 29 en triples (Jakovics hizo los cinco), el Castelló sí que percutía desde la larga distancia y le ponía en aprietos. Llegó a ponerse 61-63 y 66-68. Pequeños arreones naranjas con los dos grandes protagonistas del choque y con el poso de Beqa, la defensa de Alejandro Galán y las apariciones finales de McDonnell y Sebastian Aris le dieron un triunfo tan áspero como necesario. El Leyma sigue en la lucha por todo.