La policía de Sada urge más medios y culpa al Concello del “creciente deterioro” del servicio

Afirma que otros cinco agentes han pedido un cambio de destino por las malas condiciones |Registra sus demandas para su debate mañana en el pleno forzado por tres grupos de la oposición

El Concello de Sada celebrará mañana el pleno extraordinario forzado por el PP, Unidos por Sada y PSOE para abordar la situación de la seguridad ciudadana en el municipio. Unos días antes, este viernes 17 de noviembre, la práctica totalidad de la plantilla de la policía — once agentes y tres en trámites de incorporarse tras completar su formación en la academia— presentaron un escrito por registro con sus demandas. No son nuevas, dicen: “Son problemas que arrastran años sin solución” y que están detrás de la “creciente situación de deterioro” del servicio.

Afirman que esta situación está detrás de la merma de la plantilla, con varias plazas vacantes por traslados, y advierten de que otros cinco agentes “han expresado su deseo de cambiar de ayuntamiento en los próximos meses”.

En un comunicado, la policía cargó ayer contra el Gobierno local, concretamente contra la edil de Seguridade Cidadá, Pilar Taibo, por la entrevista concedida a LA OPINIÓN, en la que advertía de que impondrán la realización de más horas ante la falta de una contrapropuesta por parte de la policía a la modificación del cuadrante que les fue trasladada en una reunión.

La entrevista fue realizada antes de que los agentes registrasen sus demandas para el pleno extraordinario, y los efectivos recalcan que sí han presentado propuestas. Reconocen que en ese escrito no incluyen un nuevo cuadrante porque consideran, en contra de lo que mantiene el actual y el anterior Gobierno local, que ya cumplen “con todas las horas reglamentarias estipuladas como se recoge en sentencia firme de hace varios años”. Imponer más horas, advierten, solo contribuirá a mermar más la plantilla con peticiones de traslados a otros concellos que ofrezcan mejores condiciones.

No se cierran, no obstante, a “buscar una forma de cubrir todos los turnos de manera eficiente y, si llegase el caso, a modificar el cuadrante para una mayor cobertura”. Esta medida, apuntan, deberá ser negociada por un representante de la sección sindical mayoritaria (CSIF) externo al cuerpo para “dejar atrás incidencias personales”.

Los agentes firmantes expresan su “disposición a colaborar constructivamente con el Ayuntamiento” y trasladan por escrito varias demandas que, dicen, fueron “transmitidas verbalmente en varias ocasiones sin que se hayan resuelto de manera efectiva”. Varias de sus reclamaciones van dirigidas a modificar la Relación de Puestos de Trabajo (de 2006 y en la última fase del proceso de actualización) .

Sobre una de estas modificaciones hay un amplio consenso, al menos aparentemente: la readscripción de tres plazas adscritas a servicios administrativos y de urbanismo para reforzar la presencia de agentes en la calle. El Gobierno local de Sadamaioría se ha mostrado a favor de realizar esta adscripción de forma provisional, aunque se muestra reticente a modificar parcialmente la RPT y apuesta por aprobar una global. Los trámites, afirma, están muy avanzados.

Los agentes ven preciso además actualizar los conceptos de complemento específico y la compensación de horas por juicios y fomento de formación y reciclaje.

Muchas de sus reclamaciones van dirigidas a dotar al cuerpo de más medios. Denuncian que el etilómetro “lleva seis meses averiado”, que las pistolas táser adquiridas hace tres años “siguen sin ser utilizadas” y que no se les permite realizar consultas en el padrón. Reclaman también un servicio de grúa para poder actuar con la debida urgencia cuando se bloquea algún vado.

Entre sus demandas figura también la instalación de cámaras de vigilancia de tráfico y el suministro a todos los agentes de chalecos antibalas y antipunzón, así como de otros materiales “obligatorios” de los que carecen.

Los agentes firmantes urgen también mejoras en las dependencias. Denuncian que no disponen de agua caliente, tachan de “deplorable” el estado de las duchas y critican que las taquillas “son pequeñas y apenas entran una o dos chaquetas”.

Primer frente del mandato

El conflicto entre el Concello y la Policía Local se remonta a años atrás y salpicó a distintos gobiernos locales. La merma de la plantilla y la decisión del anterior Gobierno local liderado por María Nogareda de elevar a la Fiscalía el supuesto paso de horas extra sin cumplir la jornada laboral tensó aún más la cuerda.

Al conflicto laboral se suma el político. La seguridad se ha erigido entre el primer frente entre el Gobierno local de Sadamaioría y la oposición (salvo el BNG). PP, Unidos por Sada y PSOE alertan de un “grave problema de inseguridad ciudadana” y reclaman la creación de una comisión para analizar en profundidad la situación y plantear soluciones.

El Ejecutivo municipal niega un incremento de la criminalidad en Sada y acusa a los tres grupos de la oposición de generar “alarma” sin motivo.